Aunque el nombre podría sugerir lo contrario, este clásico sureño se prepara con repollo rallado que se saltea y se cuece a fuego lento en mantequilla hasta que esté tierno. Por lo general, se acompaña con tocino, cebollas y, ocasionalmente, manzanas en rodajas. El repollo frito se puede disfrutar como una comida sola, pero tradicionalmente se sirve como guarnición para acompañar papas asadas, pollo frito o pan de maíz.
¡Sé el primero en reseñar Repollo frito!
¡Tu experiencia gastronómica importa! Comparte tu reseña y ayuda a otros amantes de la comida a descubrir este plato.
Explorar Más
Descubre nuevas experiencias culinarias
Has llegado al final de este contenido