El hummus fattet, una variante del fatteh levantino, consiste normalmente en trozos de pan de pita tostados o fritos y garbanzos que se colocan en capas en una fuente para servir y luego se empapan en una salsa de tahini y yogur con ajo. Esta especialidad suele estar adornada con piñones o almendras tostadas, hojas de perejil o menta frescas, un chorrito de aceite de oliva y un toque de pimentón o pimienta de cayena por encima. Algunas versiones requieren remojar el pan en caldo o agregar caldo de garbanzos a la combinación, mientras que otras requieren usar pasta de hummus en lugar de garbanzos enteros. Este plato se prepara comúnmente en todo el Levante y, a veces, se puede servir con trozos de cordero o ternera salteados por encima. El hummus fattet se disfruta típicamente en el desayuno, aunque también se puede comer como guarnición o como aperitivo, y a menudo se sirve como plato principal para el iftar. Se recomienda acompañar este plato con una taza de té negro dulce con hojas de menta fresca o un plato de mezze árabe como acompañamiento.

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